Emociones aparecen al final de la calle, su rostro se ve a lo lejos. Una mirada intensa llena nuestras vidas, miradas que se cruzan. Lentamente cambian su rumbo para dirigirse al mismo, cambian de dirección. Un obstáculo impide mi llegada hasta él. Empieza a llover, sólo puedo esconderme. Todo intenta impedir terminar nuestro camino, uno no se rinde con tristes gotas de lluvia. Seguí mi camino y él me dio la solución.